Hiperplasia benigna de próstata
¿Qué es la HBP?
La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es muy frecuente en los hombres a partir de los 50 años de edad. Es una patología totalmente benigna que produce, principalmente, molestias de tipo urinario, que es posible tratar y controlar en el tiempo. Consiste en el aumento de volumen de la zona interna de la glándula prostática (la zona fibro-muscular) llegando a ocupar el 80 o 90% del total de la próstata. Este crecimiento es responsable del estrechamiento de la uretra a su paso por la próstata, de la contracción e irritación de las paredes de la vejiga que sufren en exceso para lograr un correcto vaciado de la orina, y consecuentemente de los síntomas que sufre el paciente.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la HBP se basa en la ecografía (valora el tamaño de la próstata y su repercusión en la vejiga y riñones), la flujometria, el PSA y el tacto rectal.
¿Qué síntomas produce?
El diagnóstico de la HBP se basa en la ecografía (valora el tamaño de la próstata y su repercusión en la vejiga y riñones), la flujometria, el PSA y el tacto rectal.
Cuando la enfermedad está ya avanzada puede producir retención aguda de orina, infecciones del tracto urinario, cálculos en la vejiga, hidronefrosis e insuficiencia renal.
Ventajas
- Dificultad micional.
- Frecuencia miccional aumentada.
- Urgencia miccional.
- Sensación de vaciado incompleto.
- Chorro entrecortado.
- Escozor micional.
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Alternativas al tratamiento
El tratamiento médico con fármacos orales es la opción en las fases iniciales de la enfermedad. En fases más avanzadas es necesaria la cirugía.
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Causas
Se desconocen las causas pero se cree que la HBP está relacionada con cierto desequilibrio hormonal que se instaura en los hombres a partir de los 50 años.
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¿Se puede prevenir?
Aunque no existen medidas de prevención sí que se puede diagnosticar precozmente e iniciar tratamiento para evitar complicaciones.
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¿En qué consiste el tratamiento?
El tratamiento consiste en mejorar el vaciado de la vejiga (bien con tratamiento médico o cirugía) para resolver la obstrucción que la próstata produce a la salida de la orina.
Otras consideraciones
El tratamiento de la HBP tiene como objetivo primordial mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados, aliviando los síntomas y evitando las posibles complicaciones que la enfermedad puede presentar. Las distintas opciones terapeúticas incluyen:
- actitud expectante (consiste en seguimiento clínico del paciente sin tratamiento alguno, solo con medidas higiénico-dietéticas y consejos de estilo de vida),
- tratamiento farmacológico (radica en la administración de uno o más fármacos cuando los síntomas son lo suficientemente molestos para el paciente)
- tratamiento quirúrgico (se reserva para aquellos casos con síntomas muy marcados y/o que no responden a la medicación). Las técnicas quirúrgicas más frecuentes son la resección transuretral de próstata (RTU) con energía bipolar, la adenomectomía prostática (cirugía reservada para próstata de gran tamaño) y la cirugía prostática con láser.
No pase por preocupaciones innecesarias
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